Qui mana?

La veritat, no em considero adicta al mòbil. Ho demostra clarament que avui, després de quatre anys, m'he canviat el telèfon. Realment estava una mica fet pols, però li tenia carinyo. Es que em costa una mica canviar en general. Què hi farem! Aquest és el meu mòbil nou de trinca. És ben xulo i té de tot. Ara ja només em queda l'ordinador, impressora, scanner, el coche.... Ves, quatre coses. He començat poc a poc, jejeje. Ui, em truquen...

Aixecant murs

Fa molta il.lusió marxar. Ni que siguin quatre dies. Queda menys d'un mes per aventurar-nos a Berlín i ja ho tenim tot reservat. Que bé fer miniviatges amb les amigues, sense por que se't foradi la butxaca. No sé si és casualitat, però ara tothom se n'hi va, està de moda? Parlant amb gent de la feina, ja n'he trobat tres que també van a alemanejar una estona. Però del viatge ja en parlarem quan torni, perquè ara no té sentit.

Auf Wiedersehen!!!

Tópicos típicos

Hoy más de lo mismo... Trabajo insustancial para gente que no tiene nada que hacer. No había tanto tráfico; claro, la suerte de los semanasanteros, que se han ido a colapsar las playas en vez de las autovías. Por lo menos se me han pasado las horas volando. El teléfono no ha parado, he dibujado un par de cocinas y he gestionado papeles, muchos papeles. Me duele en el alma la cantidad de papel que gastamos, que exageración...

He pensado que en los grandes almacenes tendrían que crear un nuevo departamento: "atención al vendedor". El gran abandonado. Siempre se habla del cliente y de sus derechos. El cliente tiene derecho a quejarse y, además, sobrevalora el uso de esa frase tan usada por cualquier contertuliano "el cliente siempre tiene la razón". Mis más de ocho años de experiencia me avalan para clarificar que este lema ensalzado por la sociedad no es siempre cierto. Y es que hay tantos tipos de clientes... Hablaré de muchos de ellos en sucesivos comentarios.

La cliente tipo de hoy es, nunca mejor dicho, la "procesionaria". Persona que lleva la procesión por dentro y descarga su mala bava contra tí. Ir a comprar una mesa y unas sillas para la cocina se convierte en una cosa de vida o muerte. La verdad, yo llevo 5 años sin cortinas en mi casa y sólo me duele un poco la espalda, pero ya está. Pues la señora de hoy venía dispuesta a darnos la mañana. La "procesionaria" se queja de todo: nadie le atiende, lleva mucho rato esperando, la mercancía que reservó su marido ( ella no estaba en ese momento ) nunca es de su agrado, siempre hay algún pequeño (vamos ni con la lupa de Sherlock Holmes) arañaaaazo en una pata de una silla, total una "torracollons".

Cuando atiendes a una/o procesionaria sabes de antemano que o no te va a comprar nada al final o vas a tener "pollo" seguro. Y mi compañero lo va a tener, porque gracias a Dios esta procesionaria de hoy no era mía.